21.12.11



Hazme el amor cuando pienses en mí y cuando sin retirar tus ganas por hacerme sentir te apriete fuerte contra mi alma, generarás lo más bello y fácil de conseguir, entenderte. Háblame despacito mientras el diálogo de satisfacción se engendra en mi cuerpo naciendo del tuyo. Sientelo cada vez que me mires y hazme el amor con la facilidad de un abrazo cómplice mientras el baile de caricias revolotea alrededor de cada instante oyéndome gemir de placer, porque justamente es extraño conseguir complicidad y conservarla bien sin hacernos daño, esa que existe en ti y en mí.

No voy a pedirte disculpas por quererte así, por necesitar sentirte, por desear tenerte y verte, por anhelar escucharte, por ansiar recorrerte con mis manos, por besarte mientras me hablas...aunque no sea de mí. No valen las disculpas mientras me haces el amor y yo intente darte eso tan fácil de conseguir, entenderte.

Que bonito y bello es entenderte, que privilegio estar contigo escucharte y desear escucharte de nuevo recorriendo contigo un viaje sin preguntarte hacia dónde vas. Porque entenderte es tan fácil; vive entre dejarse llevar por un sueño cargado de todo eso que tú eres y tu sonrisa, y entre la jueventud de tu energía que contagías cuando te adueñas tiernamente de mi sentir.

Entenderte...difícilmente se haga difícil para mí.